-¿Qué haces aquí?-
-¿Qué clase de pregunta es esa?-exigió el hombre, sonriendo con sencillez.
-Tienes razón-consintió la mujer frente a la puerta, haciéndose a un lado para dejar pasar al sujeto que tenía frente a sí.
-¿En la recámara?-cuestionó el pelinegro, abriéndose paso a lo largo del bien decorado recibidor.
-Mejor ahí que en cualquier otro lugar-le contestaron de último, al mismo tiempo que él avanzaba a través de los corredores de gusto contemporáneo, hasta que halló la gruesa puerta de madera obscura, por la que había pasado innumerables veces. Frente a ella, ni siquiera se molestó en tocar, simplemente se introdujo a través del obscuro boquete.
-Vete...-
-Claro, como si quisieras...-le respondió entre risas la voz grave del hombre a la persona que se había dirigido a él.
-¿Pero qué...?-
-Se me hizo un poco tarde, discúlpame-le rogó-Estaba muy ocupado portándome como un idiota-
-Me di cuenta-repuso el interpelado, levantando el rostro.
-Pero bueno... creo que eso ya quedó atrás-comenzó a hablar Tom, tomando asiento en la amplia cama de la recámara de su mejor amigo, quien lo miraba con el pecho aplastado contra su suave colchón-Vine... a reparar los daños que hice, una vez que ya estoy curado yo...-
-¿Y realmente te parece que estés curado?-exigió saber el segundo de los hombres allí presentes.
-No del todo-admitió con pesadez el guitarrista-Pero justamente eso intento: recuperarme por completo-
-Pues mira que va a ser un camino largo...-repuso el mánager de Tokio Hotel, volviéndose sobre su costado izquierdo para quedar bocarriba sobre el colchón-Engañaste a tu novia... con la chica de tu mejor amigo... arruinaste la gira de tu banda... e hiciste enojar a tu hermano... caíste en depresión... otra vez estás con esa cosa de la anorexia...-
-Yo no...-
-Otra vez estás con esa cosa de la anorexia e intentas negarlo...-enfatizó el apuesto hombre rubio que se encontraba desnudo del torso-Tienes bastante trabajo que hacer-
-Voy a ir con un nutriólogo mañana-se justificó el mayor de los hermanos Kaulitz-Y buscaré un instructor profesional para hacer ejercicio-
-Bien... me agrada esa idea-consintió Andreas, comenzando a ceder en cuanto a su actitud de rechazo hacia Tom-¿Qué piensas hacer con lo demás?-
![]() |
Dormitorio de Andreas |
-Alejarme de tu mujer, hablar con Bill... ir con un psicólogo... arreglar las cosas con la banda, organizar varios Meet&Greet para complacer a los fans... y... recuperar a Frances-enlistó el músico, dejándose caer en la cama al lado de su mejor amigo.
-Lo último es lo que suena más complicado-puntualizó el mayor de los hermanos Hoffman, aunque Tom ya lo sabía.
-Sí, es lo que he estado pensando...-confesó el guitarrista-Mi mayor esperanza es que ella aún me quiera-
-De que te quiere, te quiere, viejo-apostó el hombre de cabellera rubia-Pero el dolor que le causaste... y con Annya...-
-¡Ya sé, ya sé!-comenzó a exasperarse Tom-No derrumbes mis ilusiones, ¿Sí? No ahora. Las necesito para salir a flote... y, sobre lo de Annya...-
-Ya sabía, hermano-le confesó Andreas, cerrando los ojos lentamente conforme lo decía.
-¿Qué?-escupió el hermano mayor de Bill Kaulitz-¿Cómo?-
-Era más que evidente-se explicó el mánager-Tú no desapareces por gusto por largos periodos de tiempo. Además de que ella comenzó a cancelarme varias citas desde que nos encontramos en aquél café donde te pusiste como fiera-
-Discúlpame por eso...-
-Te disculpo por todo-respondió el hermano mayor de Phoebe-Después de todo, es una víbora la mujer-
-¿Apenas te diste cuenta?-repuso Tom entre risas.
-¿Y tú?-le regresó Andreas el mal chiste, antes de reírse también-Es una devoradora, en serio, viejo. El sexo podrá ser bueno... pero vaya... es una inversión bastante cara la mujer y reditúa muy poco, hablando en términos financieros. Coches, comidas, eventos, ropa, detalles... es un pozo sin fondo-
-Todas las mujeres lo son-sentenció el guitarrista-Sólo que algunas compensan ese agujero material con amor... y el amor no cuesta-
-¿Quién dice?-replicó Hoffman-Esfuerzo, compromiso, dedicación, respeto... vale más que el oro-
-En ese sentido tienes razón...-admitió el músico-Tal vez por eso falló mi relación con Frances, ¿No lo crees? Porque se me olvidó que el amor es más que bonitos detalles y sentirse bien todo el tiempo-
-Puede ser... pero no estamos aquí para filosofar, no se nos dá mucho-bromeó Andreas-¿Qué vas a hacer para cumplir el último punto de tu lista imposible? El de recuperar a Frances-
-Ah, sí... sobre eso...-rió Tom malevolamente-Tengo un plan-
No hay comentarios:
Publicar un comentario